martes, 14 de enero de 2025

Mudanza

 

No contaré las mudanzas  que tuve a lo largo de mi vida. Traigo aquí la primera de esas mudanzas.  Tocó dejar de habitar el PH de Ensenada para mudarnos a la capital de la Provincia. Aún no había cumplido 10 años. Recuerdo que nos mudamos en verano.  Y dentro de esa mudanza el recuerdo de lo que no se debe hacer: Mi padre nos dijo a mis hermanos y a mi que fuéramos subiendo cosas en el auto. Acomodando todo en huecos. Estoy casi segura que por aquél entonces el auto en cuestión era un Doge Polara blanco, una especie de heladera con ruedas (visto desde mi tamaño) La cuestión es que dentro de las cosas que subimos al auto había una pila de discos de vinilo. Pusimos los discos en la luneta del asiento trasero del auto. Todavía faltaban cargar muchas cosas. ¿Cómo iba a saber que el sol haría lo que haría?  Pues sí, el sol hizo que los discos tomaran una consistencia ondulada, básicamente empezaron a derretirse. No recuerdo si se enojó con nosotros mi padre o con él mismo.  Tampoco sé cuántos discos se arruinaron.

Mi amor hacia los vinilos volvió con fuerza años más tarde. Hoy, cada vez que debo realizar una mudanza , los vinilos junto con los libros son lo que más cuido.

lunes, 30 de diciembre de 2024

Corazón de pizza

Cada canción que escuchamos por primera vez tiene el potencial de convertirse en la banda de sonido de nuestra vida. 
El otro día después de escribir el primer posteo en este blog quedé maquinando o craneando (como le gustaba decir a Jóse) sobre qué escribir. Me gusta la idea de ficcionalizar recuerdos, acaso siempre termina siendo ficción lo que recordamos. Vuelvo a la casa de la infancia. La casa donde jugué y temí. La casa donde me escondía “jugando” debajo de la cama por si se escuchaba que alguien entraba por el pasillo. Afuera algo pasaba, no sabía qué. Pasaron algunos años para poder armar aquél rompecabezas. Pero volvamos a lo importante. La canción protagonista de este posteo. En la última casa del pasillo vivían unos chicos más grande que nosotros. Yo decía que Jorge era mi novio, él tendría unos 15, 16 años, yo apenas 5 o 6, lo mejor era que de la mano de ese amor vino una canción que Jorge no paraba de escuchar. Recuerdo que salía al pasillo para escuchar la melodía que colaba por los vidrios o la ventana. “Muchacha ojos de papel” es la primera canción que recuerdo haber cantado, también haber deformado, esto un poco como juego con mi padre... no hables más muchacha corazón de pizza, cuando todos duerman te robaré un morrón. Ahora, a la distancia, creo que es casi un sacrilegio cambiar la letra. Sin embargo, eso también para alguien con sol y luna en tauro hace que la recuerde con emoción. Pasaron muchos años hasta que volví a escuchar a Spinetta, seguramente será protagonista de más de un posteo, pasaron muchos años porque quizá por ese comienzo Spinetta siempre era el músico al que escuchaban los grandes. Y un día fui grande y agradecí serlo! Me quedo pensando ahora en que ese también fue un comienzo raro para el amor, pero de eso iré hablando (o no) en próximos posteos. Esto sigue siendo una prueba.

miércoles, 18 de diciembre de 2024

No estoy completamente inventada

¿Cómo presentarme?¿De qué modo hacerlo? ¿Sobre qué temas hablar? Escribir en primera o en tercera persona. Ficcionalizar. Contar. Cantar. Bailar. Arrancar de algún modo. ¿Por qué Chica vinilo? Fácil responder a esa pregunta. Amo los vinilos. Empezar así,con el recuerdo de la primera vez que escuché un vinilo. Claro que es un recuerdo que saldrá trastocado. Como cada cosa de la que quiera hablar. Ficción, realidad. ¿Cuál es el límite? Recuerdo: Mi padre llega del trabajo y dice: vamoa a escuchar lo que traje. El vinilo en cuestión es un maxi simple de ABBA. De un lado el tema Chiquitita en castellano y del otro un tema que no recuerdo (en este punto podría ir en busca del vinilo y escribirlo pero no tengo ganas de hacerlo). Lo que puedo afirmar es que en esos momentos la casa era una fiesta. Si tenemos en cuenta que estábamos entrando en la década del 80 en la ciudad de Ensenada. Difícil época para disfrutar de algo. Sin embargo ahí estábamos sentados como chinitos junto a mis hermanes escuchando un disco. Creo que podría empezar así.

Mudanza

  No contaré las mudanzas   que tuve a lo largo de mi vida. Traigo aquí la primera de esas mudanzas.   Tocó dejar de habitar el PH de Ensena...